(resumido)
Así como sorprendió la oferta de Bill Gates por Yahoo, ayer no tomó por sorpresa a la industria de la informática el rechazo de esa misma oferta por la astronómica cifra de 44.600 millones de dólares. Yahoo aclaró que "luego de una cuidadosa evaluación, el directorio cree que la propuesta de Microsoft subvalúa sustancialmente a la compañía".
La oferta de Gates, por tentadora que parezca, no convenció a la empresa que fundaron Jerry Yung y David Filo en 1994, quienes a pesar de haber despedido al 7% del personal para poder reestructurar a la compañía, piden que se les pague 40 dólares por acción. Eso eleva a 51.000 millones de dólares el monto para concretar la venta, es decir 6.400 millones más de lo que ofertó Microsoft. Yahoo confirmó una posición que había sido adelantada por la prensa días atrás.
Ayer, el rechazo de Yahoo a la oferta de Microsoft fue leído por el mercado como una verdadera declaración de soberanía: las acciones del portal en Internet subieron 2,2%, mientras que los papeles de la empresa de Bill Gates perdieron 1,61%. No faltaron las versiones que señalaban una oferta aumentada por parte de Microsoft o una alianza defensiva entre Yahoo y un tercero.
Ese tercero en discordia, y quien podría verse amenazado por esta situación, es Google. Días atrás, el principal buscador de Internet emitió un comunicado de prensa donde atacó con fuerza a la compañía creada por Bill Gates: "¿Podría ahora Microsoft ejercer sobre Internet la misma influencia inapropiada e ilegal que ha tenido sobre las computadoras personales? Mientras que Internet siempre ha premiado la innovación competitiva, Microsoft ha tratado frecuentemente de establecer monopolios para luego extender su dominio hacia nuevos mercados adyacentes.".
La violencia del mensaje de David Drummond, vice presidente de Google, muestra que la empresa no se ha dejado amedrentar, y que, lejos de permanecer en un estado pasivo, se han decidido internar en la batalla por impedir la venta de Yahoo.
El detrás de escena de lo que parece una simple venta, engloba el negocio de la publicidad, que el año pasado superó los 30.000 millones de dólares.
Fue por eso que, según informaban medios extranjeros, la desesperación tocó la puerta de empresas como Google dispuestas a unirse en una "cruzada solidaria", con aportación de capital mixto para poder igualar la oferta del gigante.
Fuente: Clarín
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